SEPA Mujer ayuda a lograr justicia para víctimas de robo de salarios

SEPA Mujer ayuda a lograr justicia para víctimas de robo de salarios
Organización de Long Island SEPA Mujer ayudó en el caso de 23 trabajadores que sufrieron abuso laboral en el restaurante Princess Diner, en Southampton.

Duro golpe al abuso laboral. SEPA Mujer, organización de Long Island que defiende y ayuda a las mujeres inmigrantes latinas, anunció que dos de sus casos remitidos por sus miembros a la Procuraduría General dieron como resultado que el Fiscal General de Nueva York, Eric Schneiderman, recuperara 132,000 dólares para 23 trabajadores víctimas de robo de salarios en el restaurante Princess Diner, ubicado en la villa de Southampton.

El Fiscal General dio a conocer que el propietario de Princess Diner, Richard Bivona, se declaró culpable en el Tribunal Supremo del condado de Suffolk por un cargo de defraudación, delito clase E, y por no pagar los salarios.

A su vez, el gerente del restaurante, John Kalogeras, también se declaró culpable de no pagar salarios. Ambos recibieron la orden de reembolsar a los 23 trabajadores con 132,011.11 dólares en concepto de restitución por incidentes ocurridos en el restaurante entre 2016 y 2018. La mayoría de las víctimas eran mujeres inmigrantes.

«Los empleados merecen un pago justo por un día de trabajo justo», dijo el Fiscal General Schneiderman. «Las empresas que planean explotar a sus empleados y endurecerles los salarios que obtuvieron deben tomar nota que los llevaremos ante la corte para recuperar el dinero ganado con tanto esfuerzo por los trabajadores».

«Estoy contento de que, gracias a la ayuda de organizaciones comunitarias como SEPA Mujer, conseguiremos que los empleados afectados por este atroz robo de salarios tengan la restitución que se merecen», acotó Schneiderman.

Intimidación y amenazas

«Las organizaciones como SEPA Mujer son fundamentales en la lucha por la justicia para los trabajadores inmigrantes», dijo Martha Maffei, Directora Ejecutiva de SEPA Mujer, fundada en 1993.

«Este caso involucró intimidación y amenazas, y desafortunadamente es algo bastante común en el lugar de trabajo de la población inmigrante. Después de que dos de nuestros miembros nos dijeran de su situación, juntos, trabajamos con catorce de sus colegas para facilitar reuniones con numerosas agencias de aplicación de la ley, durante meses para llegar a este momento de justicia», afirmó Maffei.

«En SEPA Mujer, trabajamos arduamente para educar a nuestros miembros sobre sus derechos y brindarles un lugar seguro para buscar asistencia, apoyo, orientación y la máxima confianza para luchar por la equidad» puntualizó la Directora Ejecutiva.

En los últimos dos años, SEPA Mujer trabajó con varias agencias de aplicación de la ley, incluida la Policía del Pueblo de Southampton, en nombre de dos de sus miembros víctimas y sus colegas.

La investigación también involucró al Departamento de Trabajo del estado de Nueva York, la Junta de Compensación de los Trabajadores del estado de Nueva York y la Fiscalía del condado de Suffolk.