La comunidad de Long Island se siente tomada en cuenta por sus médicos primarios

La comunidad de Long Island se siente tomada en cuenta por sus médicos primarios
Médicos de Long Island junto a la Dra. Jacqueline Delmont, ayudaron a las personas más vulnerables y propiciaron centros de despistaje de COVID-19 durante los meses más duros de la pandemia. (Foto: Christian Riera)

Por: Christian Riera

Delmontmedicalcare.com

 

Jacqueline Delmont es una médico de origen venezolano arraigada desde hace más de veinte años en Long Island. En su escaso tiempo libre, cualquier persona se la puede encontrar disfrutando del verano en una playa, o en otoño paseando en su bicicleta, disfrutando de la tranquilidad que proporciona ejercitarse al aire libre. Es un ser humano sencillo, cercano y muy familiar.

Antes de conocerse la noticia que un nuevo coronavirus llamado COVID-19 estaba cada vez más cerca de todos, la cotidianidad de Dr. Delmont transcurría entre su rutina diaria de atención a sus pacientes en el Centro que lleva su apellido y sus labores como Directora Médico de SOMOS, (corporación sin fines de lucro que presta atención médica a pacientes de la comunidad de Nueva York) ayudando a los profesionales de la medicina a mejorar la calidad de los servicios que prestan, así como también a optimizar la utilización de los recursos médicos.

Esa rutina cambió por completo al sentir “la imperiosa necesidad de contribuir a que hubiese acceso a despistaje de COVID-19 en las comunidades más afectadas por la pandemia, las minorías de la ciudad de Nueva York, los pacientes latinos, afroamericanos y asiáticos”, refirió la doctora Jacqueline Delmont, quien ha estado en primera línea liderando durante estos meses la apertura de más de 60 centros para despistaje del coronavirus.

Narra con orgullo y satisfacción el hecho de poder servir a la comunidad e incluso aliviar momentáneamente a mitigar la crisis económica y la perdida de empleo, apoyando con el suministro de alimentos a quienes más lo han necesitado.

Al culminar la pandemia, Dr. Delmont retornará a su cotidianidad y desea orientar esfuerzos a la educación y prevención de enfermedades como: obesidad, diabetes, enfermedad cardiovascular y detección temprana de cáncer, que afectan directamente a las comunidades minoritarias.

Su trabajo tenaz junto al de otros médicos que siempre la han acompañado en estas acciones solidarias, continuarán con el objetivo de sensibilizar a la población sobre la importancia de la medicina preventiva.