La búsqueda del asesino en serie de Tampa termina con un detenido

Howell Donaldson, de 24 años, fue arrestado en relación a una serie de asesinatos en el barrio Seminole Heights de Tampa, según informó la Policía de Tampa, Florida.

La búsqueda de un asesino en serie que mató a cuatro personas en un barrio de la ciudad de Tampa (Florida) puede haber llegado a su fin con la detención de un hombre de 24 años al que varias pruebas vinculan presuntamente con los crímenes.

Howell Emanuel Donaldson III, empleado de un restaurante McDonald’s en Ybor City, en la periferia de Tampa, fue llevado este martes a la jefatura de policía para ser interrogado y horas más tarde quedó detenido sin fianza como presunto autor de cuatro asesinatos en primer grado, según un acta policial difundida hoy.

Donaldson está recluido en la cárcel del condado Hillsborough y su primera presentación ante la justicia puede ser este jueves de acuerdo con fuentes judiciales, informó el diario Tampa Bay Times.

Una pistola, entregada este martes por el ahora detenido a un colega de trabajo, quien a su vez se la dio luego a un oficial policial que estaba como cliente en el restaurante, puso a la policía de Tampa sobre la pista de Donaldson, quien, según el atestado de su detención, nació en Charlotte (Carolina del Norte).

Cuando el jefe de policía de Tampa, Brian Dugan, informó este martes de que un hombre estaba siendo interrogado por los asesinatos en el barrio Seminole Heights, advirtió de que no estaba todavía detenido, pero se declaró «optimista» de poder capturar por fin al autor de la cadena de crímenes iniciada el pasado 9 de octubre.

Horas más tarde se supo que había motivos para el optimismo.

«La justicia está servida», dijo hoy el alcalde Tampa, Bob Buckhorn, al informar de la detención, mientras que el gobernador de Florida. Rick Scott, quien viajó a Tampa al conocerse la noticia, elogió a las fuerzas del orden por los frutos de su trabajo en este sonado caso.

Según el acta de detención de Donaldson, tanto los casquillos de bala hallados en los lugares de los asesinatos como datos extraídos del teléfono móvil del detenido y otras evidencias encontradas en su automóvil le relacionan con los asesinatos en serie.

Los casquillos de los tres primeros asesinatos indican, según pericias policiales, que corresponden a disparos hechos con una pistola Glock que el mismo Donaldson le dijo a la policía que compró el 3 de octubre pasado y siempre estuvo en su poder hasta este martes, de acuerdo con el documento policial.

El atestado, del que el canal 10 de noticias publica un facsímil, indica que no se pudo comparar los casquillos del último asesinato, perpetrado el 14 de noviembre, pero que previamente se había determinado que correspondían a la misma pistola utilizada en los otros tres casos.

En cuanto a los datos extraídos del teléfono, según el informe, sitúan a Donaldson en la zona y en las horas de los asesinatos.

Así mismo, en el automóvil del detenido se hallaron ropas similares a la que llevaba un hombre captado por las cámaras de seguridad de la zona del primer asesinato.

El Tampa Bay Times señala que en el informe consta que en una de las ropas se halló una mancha de sangre.

La Policía de Tampa, una ciudad de más de 336.000 habitantes, señaló desde el tercer asesinato que todos eran obra de la misma persona y lo ratificó cuando el 14 de noviembre fue hallado sin vida en una calle Ronald Felton, un desempleado de 60 años.

Un testigo de este asesinato describió al asesino como un hombre afroamericano de 1,85 metros de altura y complexión delgada que vestía totalmente de color negro y empuñaba una pistola, de acuerdo con las informaciones suministradas entonces por la Policía.

La primera víctima fue Benjamin Mitchell, de 22 años, a quien el asesino disparó mortalmente el 9 de octubre cerca de una parada de la línea 9 de autobuses.

Dos días después, aunque su cadáver no fue encontrado hasta el día 13, Mónica Caridad Hoffa, de 32 años, caminaba por el barrio para encontrarse con un amigo cuando recibió varios disparos que le causaron la muerte.

El 19 de octubre Anthony Naiboa, de 20 años, buscaba una parada de autobús cuando fue asesinado a tiros.

El padre de Naiboa, que era autista, había llamado poco antes a la Policía para reportar que su hijo estaba desaparecido.

La policía pidió la colaboración ciudadana para hallar al asesino y, además, se fijó una recompensa, que ha sobrepasado los 100.000 dólares, aportados por entidades públicas y privadas, para quien contribuyera efectivamente a la captura del asesino en serie de Seminole Heights.