Ilusión y temor en inmigrantes que esperan su cita para pedir asilo en EEUU

Ilusión y temor en inmigrantes que esperan su cita para pedir asilo en EEUU
La salvadoreña Maria Rivera es dueña de su propio negocio en Brentwood, Long Island. (Foto: Noticia)

 

En lo que va del nuevo año 2020 son varios los hispanos de nuestra área quienes han recibido una notificación por parte del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS) anunciando la fecha para la entrevista correspondiente a su caso migratorio de asilo político.

De acuerdo con las personas que se encuentran en esta situación, recibir las notificaciones de USCIS más allá de llenarlos de preocupación, es para algunos un alivio ya que han esperado por años una respuesta a sus solicitudes de asilo. Para ellos es el inicio de buenas noticias e ilusión renovada dado su buen comportamiento y tiempo de permanencia en EE.UU, superior a los 15 años.

“He pagado impuestos por un tiempo mayor a los 13 años, tengo mi propio negocio con el que aporto a la creación de empleos y, muy seguramente, a la reducción de las cifras de desempleo en nuestra comunidad”, afirma María Rivera, una inmigrante salvadoreña que es dueña de su propio negocio en Brentwood, en el condado Suffolk.

Como ella son muchos los latinos en Long Island y en Nueva York quienes por décadas han dado cumplimiento a sus obligaciones con el estado y el gobierno. Esto esperan sea un aliciente al momento de decidir sobre los casos presentados ante las autoridades de Inmigración.

“Mucho se dice sobre el buen comportamiento, el pago de los taxes (impuestos) y normas básicas de convivencia que debemos tener siendo residentes de este país, así que yo creo que a quienes hemos demostrado nuestro sentido de pertenencia deberían permitirnos un estatus de tranquilidad para nuestras familias”, dice por su parte el inmigrante guatemalteco José Asprilla.

Y aunque no todos los solicitantes de asilo son generadores de empleo a través de la creación de negocios, muchos aseguran ser igualmente importantes que aquellos que han logrado sus sueños en un campo tan difícil como es construir sus micro-empresas.

“Después de casi 4 años por fin recibí la notificación de Inmigración y mi cita es en marzo», comentó Miguel Ángel Barahona. “Me siento tranquilo”, confesó.

Pero no todos los inmigrantes son tan optimistas, hay quienes no dejan de tener miedo al pensar que llegó la hora de presentarse ante una oficina de Inmigración, y recurren además de a sus abogados, a todo tipo de personas que tengan casos similares y que quizás les puedan dar alguna guía.

“Estoy seguro de tener un récord limpio pero me da miedo pensar que me puedan negar mi solicitud y que yo tenga que abandonar a mi hijo, o peor aún, que me lo tenga que llevar a vivir a un país sangriento y sin oportunidades”, puntualizó Javier Mejía, otro de los inmigrantes locales que ha recibido el documento oficial de USCIS para presentarse a su cita que podría otorgar el esperado asilo en EE.UU.