Cómo ayudar a salvar a personas con sobredosis de opioides

Cómo ayudar a salvar a personas con sobredosis de opioides
El abuso, la adicción y las sobredosis de opioides son graves problemas de salud pública en los Estados Unidos. (Foto: CDC)

La cantidad de opioides recetados en los Estados Unidos sigue siendo alta y varía ampliamente de condado a condado. Los opioides, a veces llamados narcóticos, son un tipo de medicamento. Son sustancias químicas naturales o sintéticas que reducen las sensaciones de dolor.

Los opioides recetados comunes incluyen fuertes analgésicos, como oxicodona, hidrocodona, fentanilo y tramadol. La droga ilegal llamada heroína es también un opioide. Algunos opioides se producen a partir de la planta del opio, y otros son sintéticos (hechos por el hombre).

Los proveedores de atención médica comenzaron a usar opioides a finales de la década de 1990 para tratar el dolor crónico (no relacionado con cáncer), como el de artritis y el dolor de espalda. A medida que esto continuó, más recetas se escribieron, para más días por receta y en dosis más altas. Tomar opioides por periodos más largos o en dosis más altas aumenta el riesgo de adicción, sobredosis y muerte.

 

Signos peligrosos

 

La muerte por sobredosis de opioides ocurre cuando demasiada droga abruma el cerebro e interrumpe el impulso natural del cuerpo para respirar. Durante una sobredosis, la respiración puede ralentizarse o detenerse peligrosamente, provocando daño cerebral o la muerte.

Es importante reconocer los signos de sobredosis de opioides y actuar con rapidez. Estos incluyen:

– «Pupilas puntiagudas» pequeñas y contraídas

– Quedarse dormido o perder el conocimiento

– Respiración lenta y superficial

– Sonidos de ahogo o gorgoteo

– Cuerpo cojo

– Piel pálida, azul o fría

Puede ser difícil saber si una persona está drogada o experimentando una sobredosis. Si no está seguro, es mejor tratarlo como una sobredosis; podría salvar una vida.

1. Llame al 911 de inmediato.

2. Administre naloxona, si está disponible.

3. Trate de mantener a la persona despierta y respirando.

4. Acueste a la persona de lado para evitar que se atragante.

5. Quédese con él o ella hasta que lleguen los trabajadores de emergencia.

 

Uso responsable

 

Si le recetan opioides, practique un uso responsable de estos medicamentos:

– Nunca tome opioides recetados en mayores cantidades o con más frecuencia de lo recetado.

– Informe siempre a su médico sobre cualquier efecto secundario o inquietud que pueda tener acerca de sus medicamentos.

– Evite tomar opioides con alcohol y otras sustancias o medicamentos. Es muy peligroso combinar opioides con otras drogas, especialmente aquellas que causan somnolencia como Benzodiazepinas (como Xanax y Valium), Relajantes musculares (como Soma o Flexeril), Hipnóticos (como Ambien o Lunesta, Otros opioides recetados.

– No comparta ni venda sus opioides recetados.

– Guarde los medicamentos en un lugar seguro y protegido. Guarde los opioides en un lugar que esté cerrado con llave, como un botiquín o un cajón de medicamentos con llave, para mantenerlos a salvo de los niños, la familia, los amigos y las visitas.

– Deseche adecuadamente los opioides recetados vencidos o sin usar. Retírelos de su hogar lo antes posible para reducir las posibilidades de uso indebido. Para deshacerse de los opioides encuentre una opción de devolución de medicamentos cerca de usted en: TakeBackDay.DEA.gov y consulte con su farmacéutico para ver si puede devolver los medicamentos no utilizados a la farmacia.

 

Riesgos y adicción

 

Otros riesgos del uso de opioides recetados incluyen dependencia y adicción, recalca el portal Medlineplus.gov. Dependencia significa sentir síntomas de abstinencia cuando no está tomando el medicamento. La adicción es una enfermedad crónica del cerebro que hace que una persona compulsivamente busque drogas, a pesar de que le causen daño.

El abuso puede incluir tomar demasiada medicina, tomar el medicamento de otra persona, tomarlo de una manera diferente de lo recomendado, o tomar el medicamento para drogarse. El abuso, la adicción y las sobredosis de opioides son graves problemas de salud pública en los Estados Unidos.

Otro problema es que más mujeres usan indebidamente opioides durante el embarazo. Esto puede conducir a bebés adictos y que presentan síntomas de abstinencia conocidos como síndrome de abstinencia neonatal. A veces, el abuso de opioides también puede conducir al consumo de heroína.

 

Recursos disponibles

 

El principal tratamiento para la adicción a los opioides recetados es el tratamiento asistido por medicamentos. Incluye medicamentos, consejería y apoyo de familiares y amigos. Este tratamiento puede ayudarle a dejar la droga, soportar la abstinencia y hacer frente al fuerte deseo de consumir droga.

También hay un medicamento llamado naloxona que puede revertir los efectos de una sobredosis de opioides y prevenir la muerte si se aplica oportunamente.

Tome en cuenta los siguientes recursos para ayudar a una persona que pueda estar luchando contra la adicción:

– Si usted o alguien cercano a usted necesita ayuda para un trastorno por uso de sustancias, hable con su médico o llame a la Línea de ayuda nacional de SAMHSA al 1-800-662-HELP o vaya al Localizador de servicios de tratamiento de salud conductual de SAMHSA en https://findtreatment.samhsa.gov .

– Aprenda sobre la naloxona, un medicamento que salva vidas y que puede revertir los efectos de una sobredosis de opioides cuando se administra a tiempo. Visite https://www.samhsa.gov/medication-assisted-treatment/medications-counseling-related-conditions/naloxone .

– La Ley del Buen Samaritano protege de los cargos de posesión de drogas a las víctimas de sobredosis y a las personas que buscan ayuda médica para una víctima de sobredosis. Más información en https://pdaps.org/datasets/good-samaritan-overdose-laws-1501695153 .

– Explore los recursos disponibles para ayudar con la prevención de sobredosis en www.cdc.gov/opioids .