Rescatan a 17 indocumentados encerrados en un camión en Texas

La Patrulla Fronteriza rescató anoche a cuatro inmigrantes indocumentados ocultos en la parte trasera de un camión de carga en el Punto Migratorio de Revisión de Sarita (Texas), ubicado 100 millas al norte de la frontera con México. El conductor, un ciudadano estadounidense de 30 años y residente de San Benito (Texas), fue detenido y cuestionado por las autoridades migratorias y aún permanece bajo custodia. EFE

El Departamento de Policía de Edinburg (Texas) rescató este domingo a 17 personas indocumentadas encerradas dentro de un camión estacionado en una gasolinera a unos treinta kilómetros de la frontera con México, según confirmaron hoy a Efe fuentes policiales.

El asistente del jefe de la policía de Edinburg, Óscar Treviño, explicó a Efe que uno de los inmigrantes llamó ayer a un familiar suyo en México para alertar de su situación, y éste se puso en contacto con el cuerpo policial local «de manera inmediata».

«Después de recibir la llamada, nos dirigimos a la estación de servicio y pudimos rescatar a esas personas y detener a los dos sospechosos de conducir el camión», aclaró.

Según él mismo confirmó, los detenidos son un hombre y una mujer de nacionalidad cubana que ahora están bajo custodia de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos.

Tres mujeres y catorce hombres, todos ellos adultos, fueron las personas rescatadas.

Los inmigrantes que fueron salvados, originarios de México, Honduras, Guatemala, El Salvador y Rumanía, según medios locales, fueron detenidos y entregados a la Patrulla Fronteriza, al igual que la pareja de cubanos.

Este incidente ocurre tres semanas después de que diez personas perdieran la vida en San Antonio (Texas) dentro de un camión sin ningún tipo de refrigeración.

En esa ocasión, 39 indocumentados viajaban dentro de un tráiler que los llevó desde la ciudad fronteriza de Laredo (Texas) hasta San Antonio, en un viaje en el que diez personas fallecieron por asfixia y 15 quedaron en condición crítica.

El conductor de ese camión, James Bradley, enfrenta ahora cargos federales por tráfico de personas.