Consejos para evitar lesiones o enfermedades durante las tormentas invernales

Consejos para evitar lesiones o enfermedades durante las tormentas invernales
Peatones se protegen del frío con sus abrigos en Nueva York. EFE

 

Las tormentas invernales pueden provocar accidentes o lesiones fatales causadas por no vestirse adecuadamente, palear la nieve o conducir innecesariamente sobre hielo o carreteras resbaladizas.

Debido a esto, el Centro Médico de la Universidad de Nassau (Nassau University Medical Center – NUMC), insta a los residentes neoyorquinos a tomar en cuenta las siguientes recomendaciones y consejos para evitar problemas de salud durante la época invernal.

 

– Cuidado con la hipotermia

La hipotermia una de las condiciones más peligrosas que pueden ocurrir durante las tormentas severas de nieve y hielo. En un clima helado, el cuerpo comienza a perder calor más rápido de lo que se puede producir y el cuerpo pierde su energía almacenada. La temperatura corporal que es demasiado baja afecta al cerebro, lo que hace que una víctima sea incapaz de pensar o moverse bien.

La hipotermia puede desarrollarse repentinamente, sin que la persona se percate de ella. Para evitarla asegúrese de que la capa exterior de su ropa esté tejida herméticamente y sea resistente al viento. Artículos tales como capas internas de lana, seda o polipropileno mantendrán más calor corporal que el algodón. Además, permanecer seco. La ropa mojada enfría el cuerpo rápidamente.

 

– Problemas por palear la nieve

Puede causar ataques cardíacos, problemas severos de espalda y otras enfermedades. Una pala de nieve ergonómica, es decir, una con un mango curvo o una longitud de mango ajustable, minimizará la flexión dolorosa, requiriendo que solo doble las rodillas ligeramente y solo arquee la espalda mientras mantiene la cuchilla de la pala en el suelo. Una cuchilla pequeña y liviana reducirá la cantidad de peso que está moviendo.

No olvide calentar antes de comenzar. Los músculos fríos son más propensos a lesionarse que los músculos calientes y flexibles. Doble las caderas, no la parte inferior de la espalda y empuje el pecho hacia afuera, apuntando hacia adelante. Doble las rodillas y levante con los músculos de las piernas, manteniendo la espalda recta. Mantenga sus cargas ligeras. Sujete la pala lo más cerca posible de la hoja y evite torcer la espalda para mover la nieve. Siempre gire todo tu cuerpo para enfrentar la nueva dirección. Camine a la nueva ubicación en lugar de alcanzar o lanzar.

 

– A considerar la sensación térmica

La sensación térmica es un factor serio cuando se considera la salud y la seguridad. Cuando hay vientos fuertes, es más probable que haya problemas graves relacionados con el clima, incluso cuando las temperaturas son solo frías. El índice de sensación térmica es la temperatura que siente su cuerpo cuando la temperatura del aire se combina con la velocidad del viento. Preste atención a los índices de sensación térmica.

 

– Alerta a síntomas de congelación

Si descubre síntomas de congelación, como entumecimiento, piel con sensación de cera o área de piel blanca o de color gris, no frote el área. En su lugar, entre en un lugar cálido lo antes posible y caliente suavemente el área afectada con agua tibia. No use una almohadilla térmica ya que estas áreas afectadas pueden quemarse fácilmente.

 

– Cuidado con la depresión

La depresión es un problema importante durante los eventos climáticos prolongados que mantienen a las personas en lugares cerrados, en particular a las personas mayores y que viven solas. Si es posible, haga un esfuerzo para visitar a familiares o amigos o invítelos a visitarlo. Si el clima es demasiado severo, levante el teléfono y llame a un amigo o familiar.

– Almacenar suministros

Almacene alimentos, agua embotellada, baterías, linternas, mantas adicionales y tenga a mano una radio que funcione con baterías.

 

– Varado en el vehículo

Si queda varado en su vehículo, permanezca con él. Manténgase despierto. Esto lo hará menos vulnerable a los problemas de salud relacionados con el frío. Haga funcionar el motor durante unos 10 minutos por hora. Mantenga una ventana abierta ligeramente para dejar entrar el aire. Asegúrese de que la nieve no esté bloqueando el tubo de escape. Esto le asegurará contra el envenenamiento por monóxido de carbono. Mantenga sus brazos y piernas en movimiento para mejorar la circulación.